En casa de Los Serrano surge un nuevo amor entre Marcos y Eva. Diego cree que es el momento de que en casa haya un bebé e insiste a Lucía en intentar tener un hijo. Los pequeños de la casa a pesar de sus diferencias se vuelven cómplices en las trastadas que hacen, lo que les une más cada día. La taberna sufre unos problemas económicos, pero Los Serrano luchan por mantenerla.